14/V SAN BONIFACIO, Mártir

14 de Mayo

SAN BONIFACIO, Mártir

 
Así como habéis empleado los miembros
de vuestro cuerpo en servir a la impureza
y a la injusticia para cometer la iniquidad,
así ahora empleadlos en servir
a la justicia para santificaros.

(Romanos, 6, 19).


   San Bonifacio vivía en pecado, en compañía de una dama romana llamada Aglae, de quien era administrador. Un día esta mujer, movida por la gracia, lo envió al Oriente para que procurase reliquias de mártires. "¿Qué dirías, - le dijo Bonifacio al partir-, si te trajesen mi cuerpo por el de un mártir? ¿Lo recibirías?" Llegado a Tarso, vio cómo un gran número de mártires soportaban jubilosamente los más crueles tormentos. "¡Ah -exclamó- qué grande es el Dios de los cristianos, qué grande el Dios de los mártires! Servidores de Cristo, rogad por mí para que, unido a vosotros, yo también combata a los demonios". Y, en efecto, confesó que era cristiano y, después de muchas torturas valientemente soportadas, fue decapitado.

MEDITACIÓN
SOBRE LA CONVERSIÓN
DE SAN BONIFACIO
   
I. Por muy entregado que estuviera al pecado, Bonifacio se distinguía por su caridad. Daba hospitalidad a los viajeros sin recursos, e iba, de noche, por calles y plazas, socorriendo a los pobres. ¿No te has hecho culpable de faltas contrarias a la pureza? Trata, mediante una tierna caridad para con los pobres, de atraer sobre ti la gracia de Dios. La limosna libra del pecado y de la muerte, e impide que el alma caiga en las tinieblas. (Tobías).
   
II. El arrepentimiento de su cómplice dio principio a la conversión de Bonifacio; la vista de los mártires la terminó. Acaso leyendo el relato de los suplicios de los mártires hayas exclamado: "¡Qué grande es el Dios de los cristianos!" Pero, ¿te ha conducido esta admiración a imitarlos sufriendo con paciencia, por lo menos las pruebas ordinarias de la vida? Las solemnidades de los mártires son exhortaciones al martirio. Tengamos la valentía de hacer lo que nos complacemos en alabar. (San Agustín).
  
III. Cuanto más grande sea la falta, más severa debe ser la penitencia. Contempla a Bonifacio recién convertido. Se le destroza el cuerpo, húndensele agudas cañas por debajo de las uñas, se le vierte en la boca plomo derretido, y no cesa él de repetir: Gracias os doy, Señor Jesús, Hijo de Dios. Recuperemos, como él, el tiempo perdido, mediante el fervor de nuestra penitencia. Y si fuimos para los demás ocasión de pecado, tratemos de reparar con nuestros buenos ejemplos, el mal que les hayamos hecho. Así fue como Anglae quedó firme en el bien por el martirio de Bonifacio. Colocó sus venerables restos en una tumba en la vía Latina, y, junto a ella, hizo construir una celda donde en medio de austeridades pasó los últimos quince años de su vida.

El buen ejemplo
Orad por los que habéis escandalizado.

ORACIÓN
   Dios omnipotente, haced, os lo suplicamos, que celebrando la solemnidad del bienaventurado Bonifacio, vuestro mártir, merezcamos ser ayudados por su intercesión ante Vos. Por J. C. N. S. Amén.



*Santoral de Juan Esteban Grosez, S.J. Tomo II, (Ed. ICTION, Buenos Aires, 1982)

13/V SAN ROBERTO BELARMINO, Obispo y Confesor

13 de Mayo
SAN ROBERTO BELARMINOObispo y Confesor



   Se clausuró el magno concilio de Trento muy poco después que Belarmino se consagrara a Dios con sus primeros votos. Se seguían sus incidencias con pasión. Las conversaciones de los primeros años de vida religiosa de nuestro Santo tuvieron muchas veces que girar en torno al magno Concilio que había logrado estructurar los problemas básicos de teología en forma orgánica y dictaminar sabias medidas de auténtica reforma.   Lo que ahora urgía era llevar a la práctica los decretos. Esta fue la misión de Belarmino. Toda su vida girará en torno a la órbita de Trento.
   Ya su vocación a la Compañía de Jesús había nacido bajo el signo de la renovación espiritual. Sobrino del Papa Marcelo II, cuando más en auge estaba el nepotismo pontificio, amante de la literatura, música, arte, se sintió atraído hacia las bellezas del mundo clásico. Virgilio constituía sus delicias desde los primeros años.
   Por su familia, talento y aficiones estaba destinado al fausto y brillo de la corte pontificia. Parecía llamado para brillar en el firmamento del Renacimiento italiano. Pero su santa madre, Cintia Cervina, velaba por él. Le hizo ver lo peligroso de aquélla dorada escala. El mismo joven, con su característica ingenuidad, nos descubre sus reacciones íntimas. "Estando durante mucho tiempo pensando en la dignidad a que podía aspirar, me sobrevino de modo insistente el pensamiento de la brevedad de las cosas temporales. Impresionado con estos sentimientos, llegué a concebir horror de tal vida y determiné buscar una religión en que no hubiera peligro de tales dignidades".
   Misterios de Dios. La decisión firme de huir del episcopado y del cardenalato fue el móvil de la vocación religiosa del único santo jesuita obispo y cardenal.
   Dios a este hombre sediento de humillaciones le deparó triunfos insólitos, como muy pocos hombres los han experimentado. Fue el ídolo de amplios sectores, recibió el aplauso frenético de la muchedumbre que salía de sí por oír su palabra y devoraba sus libros con avidez.
   Ya en Florencia, Mondovi, y sobre todo Lovaina, antes todavía de ser sacerdote, se reveló como un orador excepcional. Llegó a escribir el superior a Roma que "nunca hombre alguno había hablado como el joven Belarmino”. Desde 1569 se convierte en el predicador nato de los universitarios. Profesores y estudiantes se apretujan en torno al púlpito del Santo. La iglesia entera estaba llena de gente. Su predicación retórica y recargada de metáforas al principio, conforme al gusto de la época, se transforma, gracias a un incidente fortuito —el extraordinario fruto que reportó de un sermón improvisado por fuerza—, en sencilla y eminentemente evangélica. Aun de naciones vecinas, e incluso de Inglaterra, venían herejes a oírle. Cada vez conseguía un fruto mayor. Conversiones, jóvenes se retiraban a ejercicios o decidían abrazar la vida de perfección.
   La predicación, con todo, no pasó de ser una de sus facetas. Pronto comenzó a descollar como teólogo, primero en el mismo Lovaina y después en Roma. Las universidades principales de Europa, incluyendo la de París disputaban por contarle entre sus profesores. Pero los superiores juzgaron más conveniente que irradiase su saber desde el corazón de la cristiandad. Allá le esperaba su gran obra. Fundó la cátedra de controversias para pulsar el momento teológico y dar la verdadera doctrina sobre los errores que pululaban entonces por los centro universitarios.
   El éxito provino principalmente del método que adoptó. Pasaba revista a los errores de los contemporáneos Pero no se limitaba a refutarlos. Los herejes quedaban más bien, como en la Suma de Santo Tomás, de marco de encuadre, servían únicamente para delimitar el planteamiento vital del problema. El iba derecho a la doctrina verdadera, exponía orgánicamente -siguiendo la estela del concilio de Trento- la verdad positiva, íntegra, total.
   Belarmino no tenía carácter de polemista. Alma sencilla, casi ingenua, carácter compasivo, estaba hecho la comprensión. El amor íntimo y apasionado a la Iglesia -supremo ideal de su vida- fue el gran motivo que le llevó a estudiar los errores de los heresiarcas.
   Sus discípulos, que corrían a sus clases, como antes en Lovaina habían afluido a los sermones, le pedían insistentemente que diese a la imprenta su exposición. Llegó a editar hasta veinte veces en treinta años el libro de las Controversias. Penetró en todas las universidades europeas y llegó a los más apartados centros de enseñanza. San Francisco de Sales, en su gran campaña contra los calvinistas, subía al púlpito armado de la Biblia y de Belarmino, como se llamaba en todas partes al gran libro. Se dice que uno de los corifeos luteranos exclamó: "Este libro nos ha perdido."
   No se limitó el Santo con instruir a los doctos. Su amor a la Iglesia le llevó a atender también al pueblo sencillo, tan ignorante en el campo religioso. Para ellos compuso la Doctrina cristiana breve, dirigida directamente a los  niños, y acompañada de otra Declaración más copiosa para los maestros. Ese pequeño libro alcanzó uno de los éxitos más sorprendentes, comparable al que han alcanzado los libros más leídos de la humanidad. Hasta casi nuestros días se ha ido editando sin cesar. Baste decir que se ha traducido a más de cincuenta lenguas y que las ediciones llegan a lo largo de tres siglos y medio a edición por año.
   Las facetas de orador, profesor y escritor no agotaron la actividad de Belarmino. El general de la Compañía de Jesús, Claudio Aquaviva, quiso que los jóvenes jesuitas se beneficiaran de su consejo e influjo. Le designó para la dirección espiritual de los que estudiaban en el Colegio Romano y después para rector del mismo centro. Tuvo Belarmino la dicha de contar entre sus hijos espirituales a San Luis Gonzaga.
   Iba creciendo de tal modo la estima del Papa para con el docto y santo jesuita, que el padre general comenzó a temer que le nombrase cardenal. Para conjurar este peligro decidió sacarle de Roma y designarle provincial de Nápoles. No le valieron al padre Aquaviva estas medidas. Clemente VIII le creó cardenal. "Le elegimos -dijo-  porque no hay en la Iglesia de Dios otro que se le equipare en ciencia y sabiduría." Belarmino se negó al principio a aceptar la alta dignidad. Alegó la incompatibilidad de su voto. El Papa lo anuló con su suprema autoridad y le mandó aceptar el cardenalato "en virtud de santa obediencia y bajo pena de pecado mortal". Por obediencia cambió su hábito, pero no el tenor de su vida. Con el mismo desinterés y abnegación de antes se dedicó al trabajo de las Comisiones cardenalicias. Intervino en las cuestiones más espinosas, como las de Galileo y la reforma del calendario. Trabajó febrilmente en la edición definitiva de la Vulgata. Asesoró al Papa en toda clase de negocios con plena franqueza. Llevado, sin duda, de su alma sencilla y recta, que no entendía de astucia diplomática y de dilaciones, expuso algunos pareceres con demasiada sinceridad. Parece que por ello cayó en desgracia del Papa, quien decidió alejarle de Roma y nombrarle arzobispo de Capua.
   El nuevo pastor se dio a sus diocesanos con celo sin igual. Allá pudo simultáneamente predicar, enseñar, escribir, organizar, explicar la doctrina cristiana. Abrazó toda clase de actividades. Realizó una reforma comparable, en pequeño, a la de San Carlos Borromeo.
   Entró en tres Cónclaves. Llegó a tener en uno hasta 14 votos para Papa. Tal vez le hubieran elegido si no hubiera sido jesuita. En esos momentos en que se hablaba de su ascensión al Trono, su jaculatoria favorita y su oración ininterrumpida era; "Señor, elige al más apto y líbrame del Papado."
   Dios no le había hecho para el Pontificado. Tenía el Santo que realizar su última misión. Dar al mundo entero ejemplo de humildad y pobreza. Al recién elegido Gregorio XV le pidió corno grande gracia el poderse retirar, al menos largas temporadas, al noviciado de los jesuitas. Tenía ya cerca de setenta y ocho años. Allá simultaneaba las actividades de cardenal con la vida de un novicio.
   Desgastado en su lucha por la defensa de la Iglesia, sus fuerzas iban fallando. Con todo le quedó todavía un arma: la pluma. La piedad que rebosaba de su alma fue impregnando sus últimos opúsculos espirituales, llenos de suave unción.
   Así se consumó la vida de este gran héroe. Había amado a la Iglesia con amor de enamorado. Dios le llamó a sí el 17 de septiembre de 1621. El Sacro Colegio quiso dejar constancia de los méritos del difunto cardenal. Escribieron en las Actas, entre otros elogios, "Varón esclarecido, teólogo eminentísimo, defensor acérrimo de la fe católica, martillo de los herejes. Varón piadoso, discreto, humilde, extraordinariamente limosnero".
   Pío XI le beatificó el 13 de mayo de 1923, le canonizó el 29 de junio de 1930 y le declaró doctor de la Iglesia el 17 de septiembre de 1931.
IGNACIO IPARAGUIRRE, S. I.
  

*Año Cristiano, Tomo II, biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1966.

13/V NUESTRA SEÑORA DE FÁTIMA

13 de Mayo

APARICIONES DE NUESTRA SEÑORA DE FÁTIMA


  En 1917, Portugal estaba al borde del totalitarismo después de la revolución de 1910. Ésta había decretado la separación de la Iglesia y el estado, la propiedad de la Iglesia había sido confiscada, y se había ordenado la disolución de las congregaciones religiosas. Los intelectuales y los gobernantes eran antirreligiosos y decisivamente anticlericales. Sostenían que las creencias católicas tradicionales eran supersticiones y así lo indicaban en semanarios y diarios. Aún las áreas rurales normalmente inmunes a las novedades intelectuales de los centros cosmopolitas se vieron afectadas por el cierre de las iglesias y una cautelosa advertencia contra cualquier expresión externa de creencias religiosas. A pesar de esto, una sólida fe religiosa estaba arraigada en los sencillos campesinos del país. En esta atmósfera, tuvieron lugar una serie de apariciones de la Santísima Virgen a tres pequeños niños del villorrio rural de Fátima.
   Las apariciones de la Santísima Virgen comenzaron el 13 de mayo de 1917, pero habían sido precedidas por las de un Ángel. 
   En 1915, tres pequeños: Lucia dos Santos, de nueve años, y sus dos primos menores, Francisco y Jacinta Marto, estaban haciendo pastar a un rebaño de ovejas en las afueras de Fátima, cuando Lucía vio una nube translúcida que parecía tener una forma humana. Esta se movió a través del cielo y finalmente se posó sobre unos pinos.
   Un año después, en el verano de 1916, los niños llevaban su rebaño hacia  una pradera llamada Couza Velha y  fueron sorprendidos por una súbita tormenta. Guareciéndose en el refugio de una cueva cercana, decidieron comer y esperar hasta que la lluvia cesara antes de reagrupar sus manadas. Después de completar un breve Rosario, la lluvia paró repentinamente y, luego se levantó un fuerte viento. Entonces vieron nuevamente la nube transluciente que Lucía había visto el año anterior. Esta vez la nube se movió hacia ellos y finalmente tomó la forma de un " Joven " de cerca de catorce años de edad, que les dijo: "No teman. Soy el ángel de la Paz. Recen conmigo". "Entonces se arrodilló e inclinándose hacia adelante hasta apoyar la frente en la tierra, y rezó : "Dios mío, creo en ti,  te adoro y te amo. Te pido perdón por todos aquellos que no creen, no te adoran y no te amanRepitió esta oración tres veces. Luego se levantó diciéndoles a los niños: "Recen de esta manera. Los corazones de Jesús y María están atentos a las voces de sus suplicas". Diciendo esto, desapareció. Los niños estaban rebosantes de gozo y en estado de éxtasis. 
   Los pastorcitos decidieron guardar silencio acerca de sus experiencias temiendo hacer el ridículo y que no les creyeran. Muchas semanas después, el ángel se les apareció nuevamente y les pidió que ofrecieran sacrificios a Dios y aceptaran cualquier sufrimiento que el Señor les enviara. En esta tercera y final aparición en Octubre, el ángel trajo consigo un cáliz y antes de ofrecer la Hostia a Lucía, la única que había recibido la Primera Comunión , se postró en tierra y dijo:

   "Santísima Trinidad, Padre, Hijo, y Espíritu Santo, Yo os adoro profundamente y os ofrezco el Precioso Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Jesucristo, presente en todos los tabernáculos de la tierra, en reparación por todos los ultrajes, sacrilegios, e indiferencia con la cual Él mismo es ofendido. Y a través de los infinitos méritos de Su Santísimo Corazón y del Inmaculado Corazón de María, os suplico la conversión de los pobres pecadores".
   Repitió esta oración tres veces y levantándose, elevó la Hostia y dijo:  "Tomad y bebed el Cuerpo y la Sangre de Jesucristo, horriblemente insultado por la ingratitud humana. Haced reparación de sus crímenes y consolad a vuestro Dios". Con esto, le dio la comunión a Lucía y dejó que los otros niños bebieran del Cáliz.
   Mientras esto ocurría en Portugal, la primera guerra mundial estallaba a través de Europa. En el otoño de 1914, el Papa Benedicto XV pidió a los líderes de Europa que pusieran fin al baño de sangre, pero fue en vano. Después de numerosas solicitudes, el 5 de Mayo de 1917, el Papa dispuso que la invocación Reina de la Paz, ruega por nosotros fuera permanentemente incluida en las letanías de la Santísima Virgen. Además dijo:  

    A María, quien es la Madre de la Misericordia y omnipotente por gracia, devotamente amémosla y atraigamos devotos de todos los rincones de la tierra - desde nobles templos hasta pequeñas capillas, de palacios reales y mansiones de ricos hasta las mas pobres villorrios - desde todos los lugares donde un alma llena de fe encuentre refugio - de la sangre que empapa las llanuras y los mares. Llevémosle a ella la angustia y el llanto de madres y esposas, el lamento de los pequeños inocentes, las miradas de todo corazón generoso, para que su mas tierna y benigna gracia sea movida y la paz que buscamos sea obtenida para nuestro agitado mundo.
   En Fátima, los niños seguían rezando y ofreciendo sus sacrificios, tal como el ángel les había pedido. El 13 de Mayo -ocho días después de que el Papa solicitara directamente la intervención del cielo- los pequeños pastores estaban llevando sus rebaños a las llanuras de Cova da Iria cuando un rayo muy brillante los deslumbró. Pensando que era un relámpago, corrieron a cobijarse bajo un alto roble. Un segundo rayo los asustó y entonces corrieron desde el árbol hacia el este buscando un mejor refugio . Sorprendidos, vieron un brillante globo de luz revoloteando sobre un pequeño arbusto. En medio de la luz se veía una Señora vestida de blanco brillante, con sus manos juntas sobre el pecho en actitud de orar, llevando en la mano derecha un Rosario.
   La Señora les habló con una suave y melodiosa voz:
   "¡No teman, no les haré daño !"
   Lucia le preguntó a la Señora de donde venia, a lo cual Ella respondió,
   "Vengo del cielo."
   Oído esto, Lucía le preguntó que quería de ellos. La Señora contestó:

    "Vengo a solicitarles a que vengan a este lugar por seis meses consecutivos, los días trece a esta misma hora. Entonces les diré quien soy, y que es lo que quiero. Luego volveré aquí una séptima vez".
   Lucía preguntó si ella iba a ir al cielo, y la Señora le respondió,
   "Si, tu irás".
   Preguntó entonces si Jacinta y Francisco también irían al cielo. La Señora respondió:
   "También. ¡Pero Francisco deberá rezar muchos Rosarios!"
   Después Lucía le consultó sobre el estado de dos niñas que habían muerto recientemente, la Señora contestó y luego les preguntó:

    "¿Desean ofrecerse a Dios, para resistir todo el sufrimiento que El pudiera enviarles, como expiación de los pecados con que es ofendido, y para pedir por la conversión de los pecadores?"
   Los niños respondieron: "Sí, queremos". La Señora entonces les dijo que tendrían que sufrir mucho, pero que la gracia de Dios seria su consuelo.
   Jacinta, la menor de los niños, estaba embelesada por la belleza y gentileza de la Señora. Cuando la aparición terminó continuaba repitiendo: "¡Oh, que hermosa Señora!".
   Aunque se habían puesto de acuerdo en no  hablar a nadie acerca de la aparición, Jacinta no pudo resistir el contarle a su madre acerca de la "bella Señora" que habían visto. 
   Tal como lo había prometido, María se les volvió a aparecer los 13 de cada mes durante seis meses. Los niños tenían mucho que sufrir. En su aparición de Julio, La Santísima Virgen les prometió hacer un milagro en Octubre para que todos aquellos que vinieran a Cova da Iria creyeran realmente que Ella estaba presente allí. También les dijo:

    "Sacrifíquense por los pecadores, y repitan continuamente, especialmente cada vez que hagan un sacrificio por ellos: ¡Oh Jesús, esto es por amor a ti, por la conversión de los pecadores y en reparación por los pecados que se cometen contra el Inmaculado Corazón de María"
   La Santísima Virgen les dijo a los niños que pidieran a todos que rezaran, convirtieran sus almas a Dios y que honraran sus apariciones en ese lugar. Durante la aparición de Julio, les comunicó a los niños tres Secretos los que no debían ser revelados sino cuando Ella lo autorizara. Luego les dijo:
   "Cuando recen el Rosario, digan después de cada misterio: ¡Oh Jesús mío, perdónanos nuestras culpas, líbranos del fuego del infierno y lleva al cielo a las almas, especialmente a las más necesitadas de tu misericordia".
   Las apariciones empezaban a llamar la atención de las autoridades, de modo que en Agosto, justo antes del día 13, se llevaron a los niños, los interrogaron, y luego los encarcelaron en la prisión de la localidad,  amenazándolos con ejecutarlos. Todo esto como consecuencia de su negativa a cambiar la historia acerca de la hermosa Señora vestida de blanco y a no querer a revelar los Secretos.
   Los que habían ido a Cova da Iria sin saber que los niños habían sido raptados, cerca del mediodía oyeron un trueno y vieron al sol perder su brillantez, luego la atmósfera se volvió opaca y observaron una pequeña forma blanca nebulosa alrededor del tronco del árbol donde las apariciones habían tenido lugar. Vieron que las nubes que rodeaban al sol se volvían de color carmesí y rápidamente pasaron por todos los colores del arco iris. Después, todo volvió a la normalidad.
   Durante la última aparición, el 13 de  Octubre de 1917, La Señora de luz se  identificó como Nuestra Señora del Rosario. Los 70,000 peregrinos empapados de lluvia que habían ido a presenciar la última aparición de la Madre de Dios, observaron al sol girar fuera de su órbita, en un arco iris de colores; finalmente, cuando esto cesó, el sol pareció precipitarse sobre la tierra causando gritos de terror entre los peregrinos. Cuando volvió a su situación normal después de cerca de doce minutos de este inexplicable fenómeno, las ropas de los peregrinos, empapadas por la lluvia estaban totalmente secas. 
   Una de las principales publicaciones anticlericales de entonces, era O Dia, el periódico mas grande de Lisboa. En Octubre 17, publicó lo siguiente:

    A la una de la tarde, medio día, la lluvia se detuvo. El cielo, de color gris perlado, iluminó la vasta y árida pradera con una extraña luz. El sol aparecía con un velo de gasa transparente de tal forma que los ojos podían ser posados en él fácilmente. El tono de perlamadre se volvió como una hoja de plata la cual se disolvió mientras las nubes fueron puestas aparte y el sol plateado, envuelto en la misma gaseosa luz gris, fue visto agitarse y rotar en el circulo de nubes rotas. Un grito salió de los pechos y la gente cayó de rodillas en la fangosa tierra. La luz se volvió de un hermoso azul tal como si viniera a través de los vitrales de las ventanas de la catedral y se dispersó sobre la multitud que se arrodilló con las manos extendidas. El azul se disolvió lentamente y entonces la luz pareció filtrarse a través de un vidrio amarillo. El amarillo tiñó los blancos pañuelos y las blusas oscuras de las mujeres. Se lo reportó en los árboles, en las piedras y en la sierra. La gente lloró y rezó con las cabezas descubiertas en la presencia del milagro que habían observado.
   El otro periódico importante de Lisboa, O Seculo, envió a su editor, Avelino de Almeida a la escena. Este había sido escéptico acerca de la totalidad de la historia de Fátima y el milagro anunciado, en un artículo que escribió la mañana del mismo día 13. Sin embargo, ahora, como testigo de los eventos de Fátima, escribió lo siguiente:

   Desde el camino, donde los vehículos se habían estacionado y había cientos de personas que no se habían atrevido a meter en el lodo donde se habían congregado, podía verse a la inmensa multitud volverse hacia el sol, el cual estaba libre de nubes en su cenit. Este lucia como una placa de plata apagada y era posible mirarlo sin ninguna molestia. Parecía un eclipse. Pero en ese momento un gran grito estalló y uno podía oír a los espectadores cercanos gritando: "¡Milagro! ¡Milagro!" Ante los atónitos ojos de la multitud, cuyo aspecto era bíblico mientras permanecían con las cabezas descubiertas, ansiosamente hurgando el cielo, el sol temblaba, haciendo de improviso increíbles movimientos fuera de todas las leyes cósmicas -el sol "bailaba" de acuerdo a la expresión típica de la gente.
   Otro observador que testificó estos eventos fue Joseph Garrett, un profesor de ciencias naturales de la Universidad de Coimbra. El Doctor Garret describió los acontecimientos de manera similar:

   Este no era el chisporroteo de un cuerpo celeste, por sus giros en sí mismo en un loco remolino. Súbitamente un clamor se escuchó entre la gente. El sol, girando, parecía perderse del firmamento y avanzar aterradoramente sobre la tierra como para aplastarnos con su poderoso y fiero peso. La sensación durante estos momentos fue terrible.
   Una versión condensada de los eventos en Fátima fue publicada por varios periódicos de todo el mundo, a pesar de que los astrónomos no reportaron que nada inusual había sucedido con el sol.
   Después de casi treinta años de ser examinado por una comisión compuesta por clérigos, físicos y científicos. La Iglesia Católica estableció, el 13 de Octubre de 1930, que las apariciones de Fátima eran auténticas,  con la siguiente declaración del Obispo de Leiría:

   "Consideramos nuestro deber:
  • 1) Declarar digna de credibilidad las visiones de los pastores en Cova da Iria, en el paraje de Fátima de esta diócesis, en el día treceavo de los meses de Mayo a Octubre de 1917;
  • 2) Otorgar permiso oficial para el culto a Nuestra Señora de Fátima."
   Los Secretos comunicados en estas apariciones fueron solamente revelados en 1942, cuando la única sobreviviente, la hermana - Lucia escribió cuatro memorias separadas entre 1935 y 1941. Los Secretos revelados por la Santísima Virgen en 1917 fueron:



  • Una visión de la realidad del infierno, previamente descrito, el cual era tan horrendo para los visionarios que estos desearon tomar todas las penas y mortificaciones inimaginables, si con esto tan sólo pudieran evitar que las almas fueran allí. María les dijo, "Ustedes han visto el infierno donde las almas de los pobres pecadores van. Para salvarlos, Dios desea establecer en el mundo la devoción a mi Inmaculado Corazón."
  • " La Primera Guerra Mundial terminará pronto. Sin embargo, si la humanidad no cesa de ofender a Dios, otra guerra peor estallará en el reinado de Pío XI. Cuando vean la noche iluminada por una luz desconocida, sepan que esta es la gran señal que Dios les da, y que Él va a castigar al mundo por sus crímenes, lo que significa guerra, hambre, persecución de la Iglesia y del Santo Padre. Para impedir esto, Yo vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la comunión de reparación de los Primeros Sábados. Si mi solicitud es atendida, Rusia se convertirá, y entonces habrá paz. Si no, Rusia propagará sus errores a través del mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia; los buenos serán martirizados, El Santo Padre tendrá que sufrir mucho, varias naciones serán aniquiladas; y al final mi Inmaculado Corazón triunfará. El Santo Padre hará la consagrción de Rusia, que se convertirá, le será otorgado al mundo un tiempo de paz".
  • Lucía dijo "que el tercer secreto no podía ser abierto antes de 1960" . Tres Papas han dicho haberlo leído en los años posteriores a 1960, pero decidieron no publicar su contenido.

  •    La devoción al Inmaculado Corazón de María se ha incrementado dramáticamente después de la Segunda Guerra Mundial luego de que los secretos fueran más conocidos. Sin embargo, esta devoción ha ido declinando durante los últimos veinte años. Las principales predicciones del segundo Secreto se han cumplido.
       La Primera Guerra Mundial finalizó un año después de la última aparición de Fátima. Muchos historiadores estarían de acuerdo en que la Segunda Guerra Mundial empezó en 1938, el último año del reinado de Pío XI , con la anexión Germana de Austria. Dos meses antes de este acontecimiento una inusual aurora con una luz ultraterrena se mostró en el cielo hacia el Norte ocasionalmente visible en la noche en altas latitudes, fue vista sobre toda Europa y reportada ampliamente por la prensa ya que fue observada tan lejos como desde el sur Roma. Atónitos observadores reportaron incendios forestales e intensos fuegos aparentemente asociados con estas luces extrañas. Poco antes de que estas apariciones empezaran, la revolución Bolchevique irrumpió y llevó a Rusia a la senda del Comunismo. Mas de 35 millones de católicos devotos fueron asesinados por Stalin ya sea en el Gulag o mediante sus escuadrones de aniquilamiento. Rusia se anexó un número de países vecinos a la USSR y el comunismo se volvió un dogma que reemplazó al fascismo como la mayor amenaza global a la libertad y dignidad personal.
       No tan conocida como el Tercer Secreto de Fátima, es una locución interior reportada en una carta escrita por la Hermana Lucia en 1943. En esta carta, la Hermana Lucia estableció que Nuestro Señor le había pedido que transmitiera sus preocupaciones al Obispo de España. Su carta dice, en una parte:

       "Debido al acto de consagración hecho por Su Santidad (en Octubre 31 de 1942), Él (Nuestro Señor), promete que la guerra terminará pronto. Pero ya que esta (la consagración) estaba incompleta, la conversión de Rusia será pospuesta. Si el obispado de España no hace caso de Sus deseos, esta (Rusia) nuevamente será azotada con lo cual Dios los castigará."

       

    12/V SANTOS NEREO, AQUILEO, DOMITILA Y PANCRACIO, Mártires

    12 de Mayo

    SANTOS NEREOAQUILEODOMITILA y PANCRACIOMártires

    STOS. NEREO, AQUILEO,
    Y DOMITILA
    SAN PANCRACIO

    Si complaciese todavía
    a los hombres, no sería yo
    siervo de Cristo.
    (Gálatas 1, 10).


       Nereo y Aquilea aconsejaron a Flavia Domitila que consagrase su virginidad al Señor, y fueron denunciados como cristianos por Aureliano, pretendiente de esta princesa. Domiciano los desterró, con Domitila, a la isla de Ponti, donde mucho padecieron por la causa de Cristo. Después fueron conducidos a Terracina. Allí, Nereo y Aquileo fueron decapitados, y Domitila pereció en la hoguera junto con las vírgenes Teodora y Eufrosina, sus dos hermanas de leche.
       Pancracio fue decapitado en Roma a los catorce años de edad, después de haber confesado con entereza a Jesucristo.

    MEDITACIÓN SOBRE
    LA MALA COMPLACENCIA
       
    I. No te imagines que podrás agradar a todo el mundo; ni nuestro Señor lo ha logrado. ¿Acaso no se murmura todos los días contra Dios? El que va a viajar quiere un día sereno y el hortelano lluvioso; Dios no puede contentar a todo el mundo: ¿cómo lo podrías tú? Haz tu deber y deja que hablen. Las cosas que se digan de ti no harán daño a tu felicidad, si tienes suficiente entereza de espíritu como para menospreciarlas.
       
    II. A menudo censurarán tus acciones aun las más santas y alabarán las más imperfectas. Si eres humilde, se te calificará de cobarde; tu virtud será tenida por hipocresía. El pródigo pasará por generoso y el hipócrita por virtuoso. ¡Fíate ahora del juicio de los hombres, que alaban el vicio y desacreditan la virtud! ¿Es por ventura razonable que te alegres con los elogios de los necios y te aflijas por sus desaires?
       
    III. No cometas pecado alguno, por pequeño que sea, ni omitas ninguna buena obra por agradar a los hombres. Si ellos son razonables, quedarán en cantados viendo que eres fiel a Dios; si no lo son, su estima debe serte indiferente. Es más fácil agradar a Dios que a los hombres, porque Dios es inmutable y los hombres son inconstantes. Cuán dichosos sería mos, si hiciéramos tanto caso de los mandamientos de Dios como hacemos de las burlas de los hombres. (San Paulino). 


    El desprecio al respeto humano
    Orad por por vuestros
    superiores eclesiásticos.

    ORACIÓN
       Señor, que la dichosa festividad de vuestros mártires Nereo, Aquileo, Domitila y Pancracio, nos sea siempre propicia y nos haga dignos de vuestras mercedes. Por J. C. N. S. Amén.




    *Santoral de Juan Esteban Grosez, S.J. Tomo II, (Ed. ICTION, Buenos Aires, 1982)

    DOMINGO INFRAOCTAVA DE LA ASCENCIÓN

     DOMINGO DESPUÉS DE LA ASCENSIÓN

    (Doble - Ornamentos blancos)


    El día de la Ascensión nos llenábamos de alegría por el triunfo de Cristo, que es también el nuestro; pero hoy su ausencia arroja sobre nosotros un velo de melancolía. Él ha subido a los Cielos, y, aunque es verdad que prometió no dejarnos huérfanos, el Espíritu Consolador no ha venido todavía. Llena de nostalgia, la Iglesia "eleva su voz hacia Él y busca su rostro" (Introito). Antiguamente le buscaba hasta de una manera sencilla, reuniéndose como lugar de estación en la iglesia de Santa María "ad Mártyres", en el viejo Panteón de Agripa, donde se guardaba el lienzo de la Verónica. Es una Misa llena de calor, de añoranza y de esperanza. San Pedro nos habla del poder de la caridad (Epístola), que realiza la unidad de los que creen en Cristo. El Evangelio nos prepara a recibir el Espíritu Santo, que es el que ha de infundir en nosotros el temple viril de los mártires. La Iglesia ama y padece. En el amor se verá si vive en nosotros el Espíritu de Dios; pero el amor se prueba en las contradicciones y en los sufrimientos. En la prueba recordemos las palabras de Cristo: "Padre: cuando estaba con ellos, Yo los guardaba; pero Yo vuelvo a Ti. No te ruego que los saques del mundo, sino que los libres del mal" (Comunión).

    11/V SAN MAJELO O MAYOLO, Abad

    11 de Mayo

    SAN MAJELO O MAYOLO, Abad


    Jesús crecía en sabiduría, 
    en edad y en gracia delante
    de Dios y de los hombres.
    (Lucas, 2, 52).

       San Majelo, habiendo terminado sus estudios en Lyon, fue nombrado, a pesar de su resistencia, arcediano de Macón. Con posterioridad fue propuesto para ocupar el arzobispado de Besanzón, pero rehusó esta dignidad y se retiró al monasterio de Cluny, donde sucedió a San Aimardo en calidad de abad. Llamado a París para el arreglo de algunos asuntos en el monasterio de San Dionisio, cayó enfermo en el camino y murió en Souvigny, en el año 994. Su admirable virtud le granjeó el amor de Dios y el de los hombres.

    MEDITACIÓN
    SE HA DE CONTENTAR A DIOS,
    A LA CONCIENCIA Y A LOS HOMBRES

    I. Dios quiere salvarte, pero no lo hará sin tu cooperación. No persigas, pues, otro objetivo que el de agradarle y cumplir su santa voluntad. Nada ha gas contrario a sus mandamientos, ni a los de su Iglesia. ¿De qué te serviría haber pasado como honesto en este mundo, haberte conquistado el favor y la estima de todos los hombres, si eres objeto del desprecio y del aborrecimiento de Dios?

    II. Condúcete según las luces que Dios te da, nunca obres en contra de lo que tu conciencia y tu razón te dicten; es el primer director a quien debes obedecer. Escucha también las inspiraciones particulares del Espíritu Santo; no las resistas nunca si quieres conservar la paz en tu interior. Si Dios y tu conciencia dan testimonio de tu inocencia, deja a los insensatos que digan lo que quieran. (San Gregorio).

    III. No tengas una virtud excesivamente rígida, sobre todo si tu condición te obliga a vivir en el mundo. La afabilidad, la dulzura, la bondad, no son in compatibles con la virtud aun más perfecta; se puede ser un santo y un hombre amable a la vez. Ten cuida do; lo que tú llamas austeridad no es a menudo sino secreta vanidad y dureza de corazón, contrarios al espíritu de mansedumbre que Jesucristo nos recomienda.

    La pureza de intención
    Orad por por el
    acrecentamiento de la caridad.

    ORACIÓN

       Haced, Señor, os lo suplicamos, que la intercesión de San Majelo, abad, nos haga agradables a vuestra Majestad, a fin de que obtengamos, por sus oraciones, lo que no podemos esperar de nuestros méritos. Por J. C. N. S. Amén.



    *Santoral de Juan Esteban Grosez, S.J. Tomo II, (Ed. ICTION, Buenos Aires, 1982)

    10/V SAN ANTONINO o ANTOLÍN, Obispo y Confesor

    10 de Mayo

    SAN ANTONINO o ANTOLÍNObispo y Confesor

     
     No queráis amontonar tesoros para vosotros en la tierra,
    donde la herrumbre y la polilla los consumen,
    y donde los ladrones los desentierran y roban.

    (Mateo, 6, 19).

     Antonino, que entró en la orden de Santo Domingo a la edad de doce años, fue un modelo de humildad, de recogimiento y de mortificación. Jamás comió carne, y, enfermo o sano, dormía sobre una tabla. Fue menester que el Papa Eugenio IV lo amenazase con excomunión para hacerle aceptar el arzobispado de Florencia y se supo ganar el cariño de sus gentes por su bondad y caridad, pues daba a los pobres todo lo que caía en sus manos. Pero también sabía exigir, y combatió los juegos de azar, la usura y la brujería que se practicaba en esta ciudad. No quiso mas riquezas que la virtud; todo lo que poseía dábalo a los pobres, llegando al ex tremo de vender, para socorrerlos, parte de los muebles y de la ropa. Fundó el famoso convento de San Marcos en Florencia y encargó a Fray Angélico, su compañero de noviciado y afamado pintor, la pintura de todos los ahora célebres cuadros en este convento. A pesar de su mala salud, fue nombrado Arzobispo de Florencia. Murió en mayo de 1459, a los 70 años de edad.

    MEDITACIÓN
    SOBRE LOS BIENES DEL MUNDO

    I.  Los bienes de la tierra, las riquezas, los placeres, los honores, no merecen tus afanes, pues no podrían hacerte mejor de lo que eres; por lo contrario, son los instrumentos de todos los crímenes. Más humilde serías, más sobrio y más casto, si fueses menos rico. La aflicción, la enfermedad y las humillaciones te hacen practicar muchas virtudes en las que ni siquiera pensarías faltándote aquéllas.
        
    II. Por otra parte, esos bienes no te pueden hacer dichoso, porque están inficionados del temor de perderlos, y porque son imperfectos y no pueden, en con secuencia, satisfacer plenamente tus deseos. Estuviste acaso alguna vez contento, verdaderamente, aun en el momento de mayor prosperidad? ¿Tus placeres más dulces no tuvieron amargura, tus más hermosas rosas sus espinas? Salomón poseyó inmensas riquezas, gustó todos los placeres, y exclama: Vanidad de vanidades, y todo vanidad. (Eclesiastés).
       
    III. Busca, pues, los tesoros del paraíso: son perfectos, no tienen mezcla de amargura alguna, no hay temor de perderlos y satisfacen plenamente nuestros deseos en toda su amplitud. Los Ángeles se ríen de nosotros cuando nos ven afanarnos tanto por edificar casas de barro que deberemos abandonar al día siguiente. Se sobrecogen de tristeza cuando ven que nos entregamos a placeres que nos rebajan al nivel de los animales. ¡Oh cristiano, espera y busca bienes más grandes! Coheredero de Jesucristo, ¿cómo regocijarte asociándote a los placeres del irracional? Eleva tus esperanzas hacia el soberano bien. (San Agustín).

    El desprecio del mundo
    Orad por las congregaciones religiosas.

    ORACIÓN
       Señor, haced que seamos ayudados por los méritos de San Antonino, vuestro confesor pontífice, a fin de que os encontremos misericordioso con nosotros, así como os reconocemos admirable en vuestro proceder con él. Por J. C. N. S. Amén.



    *Santoral de Juan Esteban Grosez, S.J. Tomo II, (Ed. ICTION, Buenos Aires, 1982)

    09/V SAN GREGORIO NACIANCENO, Obispo, Confesor y Doctor

    09 de Mayo

    SAN GREGORIO NACIANCENOObispoConfesor y Doctor


      Ceñid vuestras cinturas y tened en vuestras manos
    las lámparas encendidas.

    (Lucas, 12, 35). 

       San Gregorio Nacianceno, yendo a Atenas a estudiar filosofía, fue sorprendido en el mar por una tempestad tan violenta que prometió a Dios abandonar el mundo si escapaba del naufragio. Su voto fue escuchado y Gregorio, en compañía de San Basilio, compañero suyo de estudios en Atenas, retiróse a la soledad. Dormía en el desnudo suelo, llevaba cilicio, mortificaba su cuerpo con continuos ayunos y vigilias. Fue arrancado de su retiro, nombrándoselo patriarca de Constantinopla. Murió alrededor del año 390, a edad muy avanzada.  

    MEDITACIÓN SOBRE
    EL BUEN EJEMPLO
       
    I. Da buen ejemplo a los demás, lleva en tu mano la lámpara encendida, alumbra a tu prójimo y, con tus buenas acciones, abrasa su corazón con el amor de Dios. Es ésta una obligación que te impone la caridad; si faltas a ella, si te haces para el prójimo ocasión de escándalo, serás doblemente castigado. ¿Cómo te atreves a escandalizar a tu hermano, por quien dio su vida Jesucristo? San Francisco de Asís predicaba con su modestia; los apóstoles conquistaron más almas para Jesucristo con su paciencia que con sus predicaciones, y eso que sus palabras ardían en el fuego del Espíritu Santo.
       
    II. Cuando veas las faltas de tu prójimo, vuélvete sobre ti mismo y examina si no incurres en iguales pecados. Si nada te reprocha tu conciencia, agradece a Dios, y considera la fealdad de aquellos peca dos para que les tengas aversión; reconocerás mejor su enormidad en otro que no en ti mismo. Huye de las ocasiones en que aquel desventurado naufragó, porque quien ama el peligro en él perecerá. Dichoso aquel que no se detuvo en el camino de los pecado res. (Salmo).
       
    III. Mira el ejemplo que te dan tantas almas santas. ¡Cuántas veces ves todos los días a personas que viven en la austeridad y en la humildad, que trabajan celosamente por la salvación de las almas! ¡Cuántos y cuántas jóvenes que tienden al cielo con esfuerzo continuo! Exclama con San Agustín: ¡Yérguense los ignorantes y se ganan el cielo, y nosotros, con toda nuestra ciencia, yacemos en la carne y en la sangre!

    Huir de las malas compañías
    Orad por la conversión de los pecadores.

    ORACIÓN
       Oh Dios, que disteis al bienaventurado Gregorio a vuestro pueblo para que lo instruyera acerca de los caminos de la salvación eterna, haced, os lo suplicamos, que después de haberlo contado en la tierra como doctor y guía, merezcamos tenerlo como intercesor en el cielo. Por J. C. N. S. Amén.



    *Santoral de Juan Esteban Grosez, S.J. Tomo II, (Ed. ICTION, Buenos Aires, 1982)

    08/V APARICIÓN DEL ARCÁNGEL SAN MIGUEL

    08 de Mayo

    APARICIÓN DEL ARCÁNGEL SAN MIGUEL


     Mirad que no despreciéis a ninguno de estos
    pequeñitos, porque os digo que sus ángeles en los
    cielos están siempre viendo la cara de mi Padre celestial.

    (Mateo, 18, 10).

       San Miguel es honrado como protector especial de la Iglesia contra los ataques del demonio. La fiesta de hoy fue instituida en memoria de una aparición del santo Arcángel en el monte Gárgano, en el reino de Nápoles. Indicó el Arcángel, al obispo de Siponto, la existencia en ese lugar de una gruta en forma de iglesia, diciéndole que ese lugar debía ser consagrado al culto de Dios y de sus Ángeles. Rodeado de numerosa concurrencia el obispo celebró misa en la gruta, que llegó a ser un centro de peregrinación, ilustre por gran número de milagros.

    MEDITACIÓN
    SOBRE LA IMITACIÓN
    DE LOS ÁNGELES

     I. Los ángeles siempre están prestos a ejecutar las órdenes de Dios. Tengan éxito o no en lo que hacen, siempre están contentos, porque en todo se con forman con la voluntad de Dios. ¿No serías feliz si en todo tuvieras en vista esta santa voluntad? No te inquietarías por el resultado de tus empresas, pues no depende de ti hacer que las corone el éxito, sino de Dios que todo ordena según su agrado.
       
    II. Mantiénense los ángeles en una pureza admirable en medio de la corrupción del mundo. Esta pureza que tienen por naturaleza, tú podrías poseerla por virtud si, por ejemplo, piensas continuamente en la presencia de Dios, y si evitas las ocasiones peligrosas toda vez que no te obligue a exponerte a ellas la gloria de Dios y la salvación del prójimo. Pídele a tu Ángel custodio que te enseñe estos dos modos de conservar la pureza.
       
    III. Los ángeles se ocupan tanto de los pecado res como de los justos, de los pobres como de los ricos. Vosotros apóstoles, vosotros cristianos, todos debéis amar igualmente a todos los hombres; debéis velar por la salvación de vuestro prójimo, sea quien fuere. No aborrezcas al pecador, es una creatura hecha a imagen de Dios; trabaja en su conversión sin desanimarte jamás; en una palabra, compórtate con tu prójimo como tu bondadoso Ángel lo hace contigo. Dios se hizo hombre a fin de que el hombre llegara a ser como un ángel. (San Agustín).

    La devoción a los santos Ángeles
    Orad por la paz
    entre los cristianos.

    ORACIÓN
       Oh Dios, que regís con orden admirable los ministerios de los Ángeles y de los hombres, haced, en vuestra bondad, que durante esta vida seamos protegidos por aquellos que en el cielo os ofrecen sin cesar el homenaje de sus servicios. Por J. C. N. S. Amén.

    *Santoral de Juan Esteban Grosez, S.J. Tomo II, (Ed. ICTION, Buenos Aires, 1982)

    08/V APARICIÓN DEL ARCÁNGEL SAN MIGUEL

    08 de Mayo

    APARICIÓN DEL ARCÁNGEL SAN MIGUEL

     Mirad que no despreciéis a ninguno de estos
    pequeñitos, porque os digo que sus ángeles en los
    cielos están siempre viendo la cara de mi Padre celestial.

    (Mateo, 18, 10).

       San Miguel es honrado como protector especial de la Iglesia contra los ataques del demonio. La fiesta de hoy fue instituida en memoria de una aparición del santo Arcángel en el monte Gárgano, en el reino de Nápoles. Indicó el Arcángel, al obispo de Siponto, la existencia en ese lugar de una gruta en forma de iglesia, diciéndole que ese lugar debía ser consagrado al culto de Dios y de sus Ángeles. Rodeado de numerosa concurrencia el obispo celebró misa en la gruta, que llegó a ser un centro de peregrinación, ilustre por gran número de milagros.

    MEDITACIÓN
    SOBRE LA IMITACIÓN
    DE LOS ÁNGELES

     I. Los ángeles siempre están prestos a ejecutar las órdenes de Dios. Tengan éxito o no en lo que hacen, siempre están contentos, porque en todo se con forman con la voluntad de Dios. ¿No serías feliz si en todo tuvieras en vista esta santa voluntad? No te inquietarías por el resultado de tus empresas, pues no depende de ti hacer que las corone el éxito, sino de Dios que todo ordena según su agrado.
       
    II. Mantiénense los ángeles en una pureza admirable en medio de la corrupción del mundo. Esta pureza que tienen por naturaleza, tú podrías poseerla por virtud si, por ejemplo, piensas continuamente en la presencia de Dios, y si evitas las ocasiones peligrosas toda vez que no te obligue a exponerte a ellas la gloria de Dios y la salvación del prójimo. Pídele a tu Ángel custodio que te enseñe estos dos modos de conservar la pureza.
       
    III. Los ángeles se ocupan tanto de los pecado res como de los justos, de los pobres como de los ricos. Vosotros apóstoles, vosotros cristianos, todos debéis amar igualmente a todos los hombres; debéis velar por la salvación de vuestro prójimo, sea quien fuere. No aborrezcas al pecador, es una creatura hecha a imagen de Dios; trabaja en su conversión sin desanimarte jamás; en una palabra, compórtate con tu prójimo como tu bondadoso Ángel lo hace contigo. Dios se hizo hombre a fin de que el hombre llegara a ser como un ángel. (San Agustín).

    La devoción a los santos Ángeles
    Orad por la paz
    entre los cristianos.

    ORACIÓN
       Oh Dios, que regís con orden admirable los ministerios de los Ángeles y de los hombres, haced, en vuestra bondad, que durante esta vida seamos protegidos por aquellos que en el cielo os ofrecen sin cesar el homenaje de sus servicios. Por J. C. N. S. Amén.

    *Santoral de Juan Esteban Grosez, S.J. Tomo II, (Ed. ICTION, Buenos Aires, 1982)

    INTRODUCCIÓN

    Acerca de la Santa Misa